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sábado, junio 03, 2006

SÓLO LE TEMO A LA MUERTE

El tubo

Los carteles publicitarios de la Avenida Córdoba, una de las más transitadas del país, son abrumadores. Telefonía móvil, zapatillas, lencería, bebidas, tiendas de electrónica. Las grandes marcas son las que poseen la capacidad financiera para copar el espectro visual de los centenares de miles de personas que son interpeladas para convertirse en consumidoras.

Su agujero

Es curioso enterarse en un “boca en boca” de algo específicamente visual.
-¿Viste la obra... el cartel de Córdoba y Dorrego? – preguntó el informante casual de una excelente obra de arte, una de esas personas a las cuales no se les agradece haber mencionado alguna vez una gran película, un buen programa de televisión.
La esquina de Córdoba y Dorrego es el vértice en el cual limitan los barrios porteños de Palermo y Chacarita. Córdoba es de mano única, y a través de sus cinco carriles se accede al norte del Gran Buenos Aires. Al 5600 de la avenida, llamaba la atención un cartel de siete metros de alto por quince de largo, que decía: “Sólo le temo a la muerte”.
Si no se transitaba la calle Córdoba, sino que se iba en dirección a ella por Dorrego al 1500, al 1573 para ser exacto, el caminante se podía encontrar con una galería de arte a la que no era necesario entrar. En la vidriera de “Rosa Chancho”, había un cubo blanco, que simulaba ser una ventana, en la cual hay un muñeco de madera que aparentaba ser un niño. El brazo izquierdo, doblado a 90 grados, sostenía sobre su pecho una caja pequeña, negra, que tenía sobre ella un rosario. La nariz del niño sangraba. Las gotas rojas se observaban sobre sus pies y sobre donde estaba parado. La sangre también se distinguía en la vereda sobre la que estaba el observador, que no tardaba en darse cuenta que las gotas continúan y marcaban un camino a seguir. Así, luego de 100 metros se llegaba a un lugar donde la sangre se acumulaba. Al levantar la cabeza, al otro lado de la avenida se leía en un cartel publicitario (o al menos que antes tenía tal fin): “Sólo le temo a la muerte”.




El autor

Orilo Blandini, autor de “Solo” que se expuso en Rosa Chancho del 20 de marzo al 18 de mayo tiene treinta años. Fue estudiante de Diseño de Imagen y Sonido en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y es integrante del grupo DOMA.
DOMA es un grupo de artistas, que según su página www.grupodoma.tv, se define como “arte guerrilla”, como “agitación audiovisual”, y una de sus forma de expresión son las intervenciones callejeras, como por ejemplo la de Orilo. En su sitio de internet se puede observar su trabajo, y por lo tanto también “CORTO 01”, el cortometraje de 24 minutos con el cual interfirieron la señal Locomotion en 2001 cuando estrenaba los nuevos capítulo de su serie estrella por entonces (South Park).
“Entender la sociedad como un gran laboratorio permite captar su reacción frente a diversos estímulos. Estamos viviendo (…) un ciclo de cambio. Un clima que llama a la acción. DOMA intenta intervenir los distintos canales de información utilizando irónicamente los mismos códigos del sistema…”, así es como se presenta este grupo: acción, intervención.

Límites

Hay acciones que generan rupturas. Rupturas que no son sólo destrucción o pasión de abolición, sino que son fugas hacia otra cosa, que se conectan con esa otra cosa. En estas fugas no se trata de huir, por medio de la destrucción, sino que lo que huye es el mundo. “Como cuando se agujerea un tubo” diría un filósofo francés. Y esto es lo que logró Orilo Blandini con su obra. Liberó por casi un mes a un cartel de la vía pública de su chata tarea y lo convirtió en obra de arte. Por 28 días provocó emociones distintas a las que ese cartel provocó en toda su existencias. Por 28 días provocó.
“Hijo de puta, culpa de tu cartel de mierda que no sabia que mierda era tuve un panik atak y casi me muero, pelotudo. no podes poner esos mensaje para q los lea tod al acuidad sin saber q significa, pensa en los demas tmb, no solo en tu fakin obra” (sic) le dedicó un admirador en la comunidad de artistas www.wokitoki.com.ar.
“¿Cuáles son los límites? Esta pregunta se me viene a la gorra todo el tiempo. No es que me incomode, es simplemente que siento que lo que estoy haciendo tal vez no esté manejando ciertos límites que debería manejar” explica Orilo.
La misma vereda fue transformada. La vereda fue transformada en obra de arte. Por la vereda se pudo huir, y ser parte de otra cosa. La vereda conectó con la muerte.



Sólo le temo a la muerte

“Es evidente que el eje de lo que se ve sobrevuela el concepto de muerte. La muerte para mí es terrible, me cago todo mal” afirmaba Orilo, aunque su obra explicaba perfecto este sentimiento. Además, el muñeco de madera de 1, 90 metros sostenía una caja con cenizas eso, sin dudas, reforzaba la idea.
Orilo Blandini conectó su propio sentimiento –“Entiendo este concepto sólo por la forma en que me atravesó (…). Entiendo a la muerte desde un lugar feo, a mi me pegó para el orto y no tengo forma de zafar de eso”- con la intervención irónica que profesa el grupo DOMA.


Escape

Orilo conectó su miedo vistiendo con arte un chato cartel publicitario. Quienes tuvieron la suerte de cruzar ese límite entre Chacarita y Palermo en alguno de los 28 días, conservan la esperanza de que en medio de los carteles que inundan gráficamente la ciudad, se halle otro de esos que son como una puerta, como un orificio en un tubo de gas, por donde el mundo pueda escaparse.

sábado, mayo 06, 2006

Reforma del estatuto de la UBA

LOS QUE MÁS SABEN

Por Pablo Moreno
moreno_pab@yahoo.com.ar


La Universidad de Buenos Aires se presenta – o al menos es lo que dice su estatuto – como una comunidad de profesores, alumnos y graduados. Pero es una comunidad extraña. Su originalidad reside en que es una comunidad cuya organización se basa en el voto ponderado.

El estatuto de la UBA grita a viva voz que “No se admiten discriminaciones de tipo religioso, racial o económico”. Pero sí se admiten discriminaciones de conocimiento. Parece que en esta comunidad, las relaciones no son muy igualitarias.

Los alumnos, sólo unos cientos de miles que constituyen una pata de esta tríada comunitaria tienen una injerencia menor al 25 por ciento en las decisiones de la Asamblea Universitaria. Y ese porcentaje tiene que pasar por instancias (nótese el plural) mediadoras/representativas. Es a través de estas mediaciones que los 300 mil alumnos tienen una participación cuya proporción no parece ser numéricamente adecuada. Claro que hay que recordar que en esta comunidad la mayoría no importa. Deciden los que “más saben”.

La participación docente refleja una asimetría notable entre la realidad y la extraña representación universitaria. 660 de 37 mil docentes votan por el claustro de los profesores. El resto - excluido por múltiples razones - gracias si puede conformarse con votar en el claustro de graduados, cuya participación no tiene tanta importancia como el de docentes, donde deben votar con sectores que ni siquiera participan de la vida académica de la UBA.

¿El resultado? Votan “los que más saben” y los que lograron adquirir poder para mantener el status quo de los sistemas de representaciones. Ojalá que los que defienden este voto ponderado, disfrazado de proporcional, no logren imponer su hegemonía puertas afuera de la universidad, porque sólo podrían elegir representantes unas pocas luminarias.

miércoles, mayo 03, 2006

El conflicto de la carne

DEL XIX AL XXI

Por Pablo Moreno
moreno_pab@yahoo.com.ar


Ya desde “El Matadero” de Echeverría se observa cómo se mezcla la carne con la cultura y la política de estas tierras. A partir del siglo XIX el problema es el mismo: los intereses de un grupo minoritario se imponen sobre el resto de los más, es decir, sobre los que tienen menos. Desde las facciones de la nefasta generación del 80 (la del 1800) se perjudica al país y sus habitantes para conseguir contratos económicos ventajosos. Así es como llegamos al siglo XXI con una batalla mediática en la que el Gobierno pareciera pelear por orgullo y el sector ganadero utiliza sus nobles armas en la lucha: desabastecimiento y empleados con vacaciones forzadas.

El conflicto tiene como base que se exportó carne por 1300 millones de dólares durante 2005, cifra récord en 36 años. “¿Pero cuál es el problema de vender más, acaso eso no es bueno?”, podría preguntarse alguien. El problema es que en un marco internacional determinado que favorece la venta de carne argentina y en el contexto inflacionario en el que se haya inmerso el país, este auge en las ventas se traduce en suba de precios internos. Se vende más y por mayor precio afuera, que dentro del país. El Gobierno por su parte tomó medidas como el aumento de las retenciones y la eliminación de los reintegros a las exportaciones, que lograron contener el alza de las carnes momentáneamente. El sector cárnico, no daba el brazo a torcer, y obviamente eligió el camino de seguir aumentando sus ganancias. El Gobierno creó entonces una especie de registro que actuó finalmente como traba para las exportaciones. Entre estos debates se encontraban estos sectores en pugna cuando un brote aislado de aftosa en Corrientes torció la balanza a favor del presidente Kirchner a principios de febrero. Pero siempre que llovió paró, y la tormenta de la aftosa pasó casi sin consecuencias. Borrón y cuenta nueva: se exportó casi un 500 por ciento más que en febrero de 2005. Ante las amenazas de sumar impedimentos a las exportaciones, los grandes frigoríficos gritaron a viva voz que se “auto-limitarían” bajando sus ventas al exterior en un 20 por ciento, disparate que nunca ocurrió.

La temperatura de la discusión seguía en aumento, y la ministra de Economía, Felisa Miceli estableció la suspensión de las exportaciones de carne por 180 días, para aumentar la oferta del producto en el mercado local y así bajar los precios. Una semana después, el mismísimo presidente pedía a los consumidores que no compren carne, en guerra abierta con los productores. Pero nada parecía ser suficiente.

Finalmente, se sancionaron precios de referencia para 12 cortes de varias categorías de hacienda, como así también valores de referencia para la hacienda en pie que arribara al Mercado de Liniers. Estas medidas, sumado a más de una veintena de inspectores ubicados en lugares estratégicos, han logrado que a finales de este mes de abril, el precio de la carne empezara a bajar en los denominados “cortes populares”. Queda por resolver qué sucederá con las exportaciones, los rumores son que se permitirán exportaciones controladas de los cortes más caros, pero por ahora, la veda está vigente.

Así quedan delineadas las diferencias sociales en el más simbólico de los alimentos argentinos. La brecha se acentúa aún más, pocos arriba y muchos abajo. Juan Sasturain describe en su “The carne blues” tremenda distancia: “Parado solo en la loma / lomo asoma / solo de soledad dorsal / tierno caro / desde arriba / mira cómo / carne abajo / se desloma / trozado corte vulgar / cabo a rabo”.

viernes, abril 07, 2006

ZONA NORTE: ZONA DE TÚNELES

Por Pablo Moreno
Cinco son las obras terminadas, en construcción y proyectadas en los municipios de Vicente López, San Isidro, San Fernando y Tigre. Los trabajos se realizan bajo las vías del Ferrocarril Mitre.
La zona norte del Gran Buenos Aires está signada por un nuevo fenómeno: la construcción de túneles bajo las vías del ferrocarril que une Retiro con Tigre. A las dos construcciones que ya se encontraban en San Isidro - en las calles Roque Saenz Peña y en Primera Junta -, se le han sumado en muy corto tiempo otros cinco emprendimientos. El auge de este tipo de construcciones se debe a la iniciativa conjunta de la Secretaría de Transporte, a través del "Proyecto de Transporte Urbano de Buenos Aires" (PTUBA), las municipalidades, y la empresa consecionaria Trenes de Buenos Aires (TBA). El proyecto es eliminar los pasos a nivel vehiculares reemplazándolos por pasos a distinto nivel.
El precursor fue el túnel inaugurado de 26 de diciembre de 2005 en la calle Paraná, que divide La Lucila y Martínez. El proyecto inicial para esta realización dataría de 1972, pero sólo ahora fue concretado. Por el paso bajo las vías sólo pueden circular automóviles y camionetas y el propósito es mejorar la fluidez vehicular entre las avenidas Maipú y Santa Fé con la avenida Libertador, como así también evitar los frecuentes accidentes. La construcción desde sus inicios fue resistida por algunos vecinos, que argumentaban que provocaría que los inmuebles se devaluarían y que aumentaría la inseguridad, pero no lograron detener la obra que ya se encuentra en funcionamiento.
Donde la avenida Centenario comienza a llamarse Presidente Perón, lo que indica el límite entre Beccar y Victoria, está en plena construcción el túnel que tuvo inicialmente un plazo de ejecución de 9 meses y un costo de más de 9 millones de pesos. La obra está a cargo de la empresa Chediack S.A., ganadora de la licitación. Se estima que el 15 de mayo, día del patrono de San Isidro, se finalizarán las obras luego de 12 meses. Se trata de un viaducto de 300 metros de largo, y dos carriles para cada sentido, 4,80 metros de alto. El túnel permitirá el paso tanto de automóviles y camionetas, como así también colectivos, ómnibus de larga distancia y vehículos de carga. Contará de igual forma con accesos peatonales. En el lugar conocido popularmente como “las 4 barreras”, se encuentra cerrado el tránsito desde hace meses, por lo que los vehículos deben desviarse por las calles de la ciudad de Beccar, hecho que no es menor ya que la cantidad de automóviles que circulan por el lugar es numerosa, además de muchas líneas de colectivo que tiene ese cruce en su trayecto. La obra fue visitada en octubre del año pasado por el Presidente Néstor Kirchner y su esposa Cristina Fernández, y prometieron que la obra sería finalizada en el primer trimestre del presente año.
Los tres túneles restantes, son proyectos aprobados de próxima realización. En la calle Acassuso en La Lucila, se construirá un túnel de características similares a las del de Paraná, con una altura de 2,37 metros y dos carriles con un ancho total de 7,20 metros, y como el antes mencionado, también será de uso exclusivo para autos y camionetas. La licitación la obtuvo la empresa Carbe S.A. para concretarla en un plazo de 12 meses, y la construcción incluirá veredas de 1,65 metros a ambos lados de la calzada.
Así mismo, se construirá un cruce bajo nivel en la calle Pueyrredón, límite entre la ciudad de Martínez y la localidad de Acassuso. Será el sexto paso a nivel con el que contará San Isidro. El presupuesto para este proyecto es de 1.715.000 pesos.
El último proyecto es el túnel planeado para la intersección de las vías del Mitre con la ruta 197, al lado de la estación Carupá, que marca el límite entre los partidos de Tigre y San Fernando. La obra contará con un presupuesto de 18 millones de pesos aportados por el Banco Mundial. El plan de construcción fue revisado en febrero por las autoridades de San Fernando y un grupo de comerciantes de la zona, preocupados con algunos puntos de la obra. Algunas de estas inquietudes fueron la construcción de nuevos comercios que compitan con los ya existentes, el mantenimiento de las actuales paradas de colectivos – importantes por el gran caudal constante de pasajeros -, y la remodelación de las veredas.
Se espera que con la puesta en funcionamiento de todos estos accesos los traslados y el tránsito vehicular sean mucho más fluidos, ya que los paso a nivel de la línea Retiro - Tigre dividen toda la zona provocando grandes congestionamientos y no pocos accidentes. Habrá que esperar un tiempo para comprobar los resultados.

lunes, abril 03, 2006

“MALVINAS ES UNA MADRE QUE DEJAMOS ABRAZANDO A SUS HIJOS MUERTOS”

Por Pablo Moreno
José Gonzalez se encuentra en los “alrededores” del acto que realiza el Centro de Civiles Veteranos de Guerra en el cenotafio de la Plaza San Martín de Retiro, en conmemoración a los caídos en las Islas Malvinas. No participa del evento porque para este ex combatiente, no significa nada, sólo divide a los veteranos de guerra. A los 19 años le tocó entrar en combate, al ser sub oficial de Ejército en Río Gallegos, su ciudad natal. Hoy, a los 42, se muestra molesto con el acto, pero espera poder juntar a los ex combatientes para el acto que realiza otro grupo en Plaza de Mayo.

¿Cuál es el significado del acto de hoy?
El acto de hoy no significa nada, no sirve para nada.

¿Por qué?
Porque nos cortaron en cuatro pedazos hoy. Nosotros viajamos con la esperanza de que íbamos a estar acá, con los familiares de muchos ex combatientes, vinieron veteranos de Jujuy, de Corrientes, de Chaco, y te encontrás que solamente hay una “banda”. Marina, Prefectura, Policía, Gendarmería, que van a hacer su acto separado. Nosotros queremos ser uno, no recortados con una tijera por el Gobierno.

¿Ustedes dónde proponen hacer un acto único?
En Plaza de Mayo, para tratar de juntarnos todos.

¿Esperan centralizar así a todos los veteranos?
Sí, y vamos a expresar muchas opiniones de ex combatientes, ya que acá son todos civiles, hay unos pocos veteranos pero que no van a Plaza de Mayo porque prefieren quedarse.

¿Cuáles son las reivindicaciones que planean realizar?
Ahora nos juntamos para unirnos y para que así el Gobierno escuche lo que necesitamos.
¿Y cuáles son esas demandas?
Son evidentes, desde que terminó la guerra se han suicidado 302 ex combatientes. No hace un mes de que se mató otro, y la razón es porque al veterano no le dan trabajo, no tiene una contención médica, psicológica. Algunos vinimos bien, pero otros lo hicieron mal. Yo por ejemplo, me pasé nueve meses en un hospital sin decir una palabra. Mi mamá me hablaba, y yo la miraba pero veía otra cosa. Los veteranos van caminando por la calle, y la gente los mira como a un ciruja más de la ciudad, y a uno le duele.

Entonces también piden el reconocimiento de la sociedad.
Sí, pero más que nada del Gobierno, que haga las cosas como nos prometieron.
¿Qué les prometieron?
Nosotros hace cinco años pedimos cinco puntos. Nos dijeron que eran muchos y les sacamos dos. Y de los tres, prometieron que antes de la navidad de 2005 los iban a cumplir, y no lo hicieron.

¿Cuáles eran esos reclamos?
Salud, trabajo, y que seamos reivindicados, volver a la vida de nuevo. No le pedíamos más nada. No pedíamos autos y casas como le dieron a los ingleses.

¿Tuvo la posibilidad de volver a las islas?
Me anoté seis veces para volver. Estuve en Punta Arenas, Chile, donde me quedé tres meses esperando para ir, pero siempre decían que no estaba mi nombre y apellido.

¿Y eso a que se debía?
A un libro que estoy por terminar, que se llama “Sombras de un ex combatiente”, en el que cuento todo, lo que pasé allá y lo que me encontré cuando bajé.

¿Y a quién no le gustó que usted escriba el libro?
A los militares, hasta me han querido detener por expresar cosas que ellos decían que son secreto, pero no es así, yo solo cuento por lo que pasé.

¿Qué significa Malvinas para usted?
Malvinas es una madre que dejamos abrazando a sus hijos muertos.

A 24 AÑOS, UN MINUTO DE SILENCIO Y MUCHAS REIVINDICACIONES

Por Pablo Moreno
La mañana del domingo presentó un cielo totalmente nublado en Buenos Aires, mientras en la Plaza San Martín, en Retiro, se realizaban los preparativos para dar comienzo al acto en conmemoración a los caídos en Malvinas. El Centro de Civiles Veteranos de Guerra, junto a numerosas agrupaciones, organizaron el evento de recordación en el cenotafio ubicado en la plaza porteña, donde figuran los nombres de los jóvenes muertos hace ya 24 años.
Algunos minutos pasaron de las 12.20 cuando se inició el acto. El padre Martínez Torrens, veterano de Malvinas, pidió un minuto de silencio por las víctimas de la guerra, y el sol comenzó lentamente a aparecer, hecho que fue destacado luego en su discurso. Posteriormente se cantó el himno, y en su final, se observaron varios puños en alto y el canto a viva voz “¡Oh, juremos con gloria morir!”.
La consigna del acto fue clara: se puso énfasis en la reivindicación de la guerra. El veterano José Parada explicó la influencia que Inglaterra tiene todavía hoy en el país, e hizo referencia a la “expropiación de la riqueza ictícola”, el mismo camino que estaría preparando dicho país para los hidrocarburos, además de extender su jurisdicción marítima sobre el Atlántico Sur. También hizo lo propio Santiago Tettamanzi, un ingeniero que fue parte de la tripulación del barco mercantil “Río Alcarañaz”, hundido por la flota británica, que no dudó en afirmar que “la guerra la empezó Gran Bretaña”.
El micrófono pasaba de mano otra vez, y el sol había vencido definitivamente a la nubes. El vice-comodoro retirado Horacio Ricciardelli tomó la palabra y expresó que la guerra “fue motivo de unidad nacional, y no fue un acto oficial, lo impulsó el pueblo junto a las Fuerzas Armadas”. Ricciardelli exclamó que remitir la historia sólo al 2 de abril es un acto “mentiroso y canalla” y denunció la existencia de una campaña de “desmalvinización”. En sintonía con estas declaraciones, el mayor Jorge Vizoso Posse, gritó enojado por la película “Iluminados por el fuego” que “no es pacifista sino que invita a rendirse ante el poder colonial”. También defendió el servicio militar y sostuvo que al perderlo “el país se queda sin reservas y se llena de delincuentes”.
El último orador fue el contra almirante retirado Carlos Büsser, quien reivindicó la decisión de la invasión y dijo que la población festejó la guerra: “No fue una dictadura la que luchó, sino el pueblo”.
También hubo voces discordantes, que provenían de algunos veteranos, pero refiriéndose a la organización del acto. José González se quejaba en este día “nos separaron en cuatro pedazos”, en referencia a la conmemoración que organizaban otros veteranos en Plaza de Mayo.
El sol dominaba la escena e iluminaba los nombres tallados en el mármol negro del cenotafio. La única sombra existente era la que brindaba la enorme bandera argentina que flameaba en el centro del lugar. Pasadas las 13.30 se colocaron las ofrendas florales, y se culminó el acto, en el que hubo mucha reivindicación de la causa y poco homenaje a las víctimas, al grito de “¡Vivan los héroes de Malvinas, viva la patria!”

viernes, diciembre 23, 2005

"EVO, EVO PRESIDENTE"

"Compañeros indígenas, por primera vez, somos presidentes" afirmó el presidente electo de Bolivia, Evo Morales. Al obtener más del 50 por ciento de los votos, el próximo mandatario fue elegido sin necesidad de pasar previamente por el Congreso. En segundo lugar quedó Jorge Tuto Quiroga (30 por ciento de los votos), y tercero Samuel Doria Medina (9 por ciento).
Las banderas con los colores del MAS (azul, blanco y negro) flamean por gran parte de Bolivia, hasta se las ve en Santa Cruz, que para algunos es la prueba del “voto oculto” ya que ese departamento es el que teóricamente se presenta como más reticente al presidente electo. También se escuchó con frecuencia la canción de la campaña que en su estribillo dice algo más o menos así: “Evo, Evo presidente”.
La imagen que deja morales, es la de remarcar la fuerza y el reconocimiento a lo que es su columna vertebral y más leal base de poder, por eso se lo escucha repetir la referencia a los movimientos sociales una y otra vez, y de resaltar las luchas por los recursos naturales. En los medios, se mostraron un poco ansiosos y apresurados en sacar una radiografía del líder boliviano. Por ejemplo en Argentina, el lunes en los noticieros de la noche, pusieron énfasis en las típicas palabras conciliadoras que los últimos presidentes electos han mantenido en sus discursos victoriosos (Lula, Tabaré, Lagos), para demostrar que no serían tan fieles a su pasado izquierdista. Pero entre las frases esbozadas por Evo Morales se lee: “El tercer milenio es la época de los pueblos originarios ya no del imperio, es la época de la lucha contra el modelo económico". Son también numerosas las referencias a los países de la región, como para dejar en claro que Bolivia se subirá al tren Chávez – Lula – Kirchner – Tabaré, que por el momento tiene sólidos discursos y prácticas confusas, pero al menos discursivamente se intenta sacar la camiseta del neoliberalismo, que en la práctica domina aún claramente.
Mientras el presidente Morales se reúne con los movimientos sociales que lo llevaron al poder, para llegar a acuerdos para la conformación de su futuro Gabinete, las acciones de la española Repsol están a la baja, como impacto por la victoria del dirigente “masista”. A pesar de las declaraciones en las que se afirma que no se harán cambios apresurados, los discursos electorales de nacionalización inquietan a muchos. Hasta Argentina y Brasil, se encuentran expectantes, ya que durante la campaña se afirmó que serían revisados los contratos relacionados con el gas.
El próximo 22 de enero será cuando asuma Morales oficialmente la presidencia boliviana. En su porvenir tiene un camino difícil, pero todo se predispone a que esta vez se va a intentar recorrer uno diferente, con la intención de mejorar la situación de un pueblo golpeado. Como siempre, resta ver si triunfará el pueblo, o las corporaciones que pregonan por el beneficio de unos pocos en detrimento muchos.

domingo, noviembre 27, 2005

16 AÑOS NO SON NADA... EN EL TRÁMITE MÁS LARGO DE LA HISTORIA

Por Pablo Moreno
moreno_pab@yahoo.com.ar
- Podemos averiguar en radio La Tribu – dice Luciano
- No, ni ahí, está todo ocupado, ya pregunté hace unos meses – responde un poco resignado Javier – Hay que buscar alguna emisora por la zona, que sea barata.

Luciano y Javier, son estudiantes de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y están elaborando un proyecto para realizar un programa de radio. “Queremos que los trabajos realizados por los alumnos, en materias como “Taller de radio”, o “Taller de expresión III”, tengan un espacio, y fomentar a la vez otra forma de comunicación, distinta a la de los medios masivos, y también abrir las puertas de la Facultad hacia afuera, hacia la realidad” explica Javier, en el bar estudiantil que se encuentra en la sede de Ramos Mejía y Franklin de la Facultad de Ciencias Sociales. La dificultad con la que se encuentra el proyecto, es la económica, ya que la única forma de poner el programa al aire es pagando un espacio, en alguna radio de corto alcance. Si la universidad tuviera una emisora, quizás podrían resolver su proyecto, pero no la tiene. ¿Por qué?
La UBA cuenta con 250 mil alumnos, pero a diferencia de decenas de universidades del país, no dispone de una emisora de radio propia. El decreto 1054 del 6 de julio de 1989, le adjudicó a esta casa de estudios la frecuencia 90.5 Mega Hertz, de categoría “G”, lo que significa un área de cobertura primaria de 37 kilómetros. Pero los tiempos en el proyecto “Radio UBA” son largos. Anuncios entusiastas desde diversos medios anunciaron la inminente llegada de esta emisora. En el mes de mayo del corriente año, Página/12 publicaba una nota en que la radio “está a punto de salir al aire”. Es curioso leer una nota de Microsemanario de mayo de 1993, en la que se sostiene que “en la primavera de este año, la universidad va a contar con radio propia”. Con doce años de diferencia, los pronósticos se repiten y la radio no llega.
El proyecto depende de la subsecretaría de medios de la UBA, a cargo del profesor Oscar Bosetti, que el 27 de diciembre de 2004, presentó la carpeta técnica ante el Dr. Ignacio Cingolani, director de planeamiento y control del Comité Federal de Radiodifusión (COMFER), que fue aprobado el 8 de marzo de este año. El 30 de marzo, fue entregado el Certificado de Inspección Técnica, procedimiento necesario para avanzar hacia la parte administrativa que supuestamente habilitará la radio en forma definitiva. Desde dicha fecha, hasta el presente, dicho trámite aún no pudo ser concretado, y el proyecto avanza hacia los 17 años de edad. Según Bosetti, la entrega de la carpeta técnica, “no fue entregado en tiempo y forma por la gestión anterior, lo que provocó más demoras”.
Los requerimientos técnicos están en principio cubiertos, con los estudios de la calle Arenales al 1300, en Capital Federal, y con la antena que fue instalada en la terraza de la Facultad de Medicina, en Paraguay al 2100.
Para la realización de “Radio UBA”, el rectorado solicitó a la carrera de Ciencias de la Comunicación un proyecto para el rol central de gestión y administración, a Filosofía y Letras, se le encargó lo propio con los contenidos artísticos, y a Diseño de Imagen y Sonido el proyecto e imagen institucional.
A la principal carrera afectada a la postergada radioemisora, Ciencias de la Comunicación, se le realizó el pedido antes mencionado a principios de año, pero aún, después de 8 meses, no lo ha finalizado: “el tema entra en la próxima reunión de la Junta de la carrera, y ya tuvo algo de tratamiento en la anterior, y hay borradores de proyectos a considerar” afirma Damián Loreti, abogado, director de la carrera y candidato a vice-decano de la Facultad de Ciencias Sociales en marzo del próximo año.

- Hay que conseguir horas de grabación, para las artísticas y las investigaciones – continúa Javier, el más preocupado por las limitaciones financieras de su proyecto.
- Sí, yo averigüé en el CEPIA, para ver si nos dejaban alguna hora, pero me dijeron que no se podía, que estaban a full con los horarios – remata Luciano.

Este problema con que se topa el proyecto de estos estudiantes de 24 y 25 años, muestra la realidad de los dos estudios con que cuenta la carrera de Comunicación, que a pesar de no transmitir nada, deben ser “socorridos” por los estudios que ofrece gratuitamente radio La Tribu, dirigida por Gastón Montells, docente de la facultad, sólo se efectúa el pago de los honorarios de los operadores por parte de la carrera.
¿Las carreras pueden realizar sus propias emisoras para evitar el paso lento del proyecto de la Universidad? La respuesta es no. Oscar Bosetti, afirma que “la Carrera de Ciencias de la Comunicación que pertenece a la Facultad de Ciencias Sociales, en su historial no realizó una solicitud de licencia para instalar una radio propia”. Damián Loreti responde a esto afirmando que “ni la carrera ni la Facultad pueden pedirlo” porque “no pueden ser titulares de una frecuencia, ya que no tienen personalidad jurídica, sólo la pueden tener las universidades, sólo éstas pueden ser titulares de algo”. Una alternativa legal a esta imposibilidad puede ser “la conformación de un colectivo de trabajo, que se ocupe de las instalaciones, del personal y de entrar a concurso por una frecuencia, y ser apoyado económicamente por la carrera” explica el Licenciado en Ciencias de la Comunicación Diego Rossi.
Pero para estas alternativas, según el director del Centro de Producción de Investigación Audiovisual (CEPIA) de la Facultad de Ciencias Sociales, Damián Valls, no hay interés por parte de los que deberían estar involucrados: “en la actualidad y desde hace unos años, los estudiantes no están preocupados por tener una radio, tampoco los docentes de las materias afectadas”. Valls pone como ejemplo el convenio realizado en 2003 entre la carrera de Comunicación y Radio Nacional: “Se hicieron programas a pedido diseñados por el CEPIA, se realizaron convocatorias a estudiantes que tuvieran ganas de desarrollar algún proyecto, y hubo algunos espacios destinados a materias como Taller de Expresión III, y Taller de Radio que nunca los usó, en su espacio de Radio Nacional se pasaban discos”.
Muy diferentes son las realidades en este aspecto de otras universidades. La Universidad Nacional de La Plata inauguró el 5 de abril de 1924, la primera emisora universitaria del mundo, “para vincular más la universidad al medio social en el que vive” como dice su carta de presentación, y su programación sólo se vio interrumpida y condicionada durante las dictaduras militares. Tiene dos frecuencias (AM 1390 y FM 107.5) y además se la puede escuchar por internet. La Universidad Nacional del Comahue (UNC), también cuenta con una emisora, es la FM Antena Libre. En tanto la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), en su Facultad Regional Mendoza, cuenta con su FM UTN (94.5 MHz). En 1985, los alumnos armaron en un trabajo práctico un transmisor RF y comenzaron a transmitir desde un laboratorio. A través de un decreto del Poder Ejecutivo Nacional, obtuvieron la frecuencia en 1991, y con el paso de los años lograron profesionalizarse y mejorar los equipos. Los programas de dicha radio están realizados en su mayoría por estudiantes de comunicación de la UNC. La Universidad Nacional de La Matanza, también cuenta con una radio desde 2000 en el 89.1 MHz, y reúne a docentes, estudiantes y graduados de la Licenciatura de Comunicación Social. Esos son sólo algunos ejemplos de las 36 emisoras universitarias que existen en el país que “inventó” este tipo de proyectos. Pero los estudiantes de comunicación de la UBA, y los de las demás carreras, no tienen la suerte de realizar prácticas y permitir trascender los muros de los claustros hacia la sociedad.
El 19 de octubre pasado, se llevó a cabo en Vaquerías, Córdoba, las "Primeras Jornadas Universitarias La Radio del Nuevo Siglo", organizadas por las carreras de Comunicación de la Universidad Nacional de Córdoba y la Universidad Nacional de Río Cuarto. En el plenario de docentes de Comunicación radiofónica realizado dentro de dichas jornadas, se le reclamó al Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), un amento de presupuesto para las radios universitarias, como así también se le reclamó al Poder Ejecutivo Nacional, la normalización y el reconocimiento legal de todas las radios universitarias. Oscar Bosetti, estuve presente, y forma parte del Cmité Ejecutivo Permanente de las jornadas.

- Queremos que lo que se hace en las materias, no quede en el anonimato, y creemos que esto va a ser muy beneficioso, tanto para los alumnos, que se verán más motivados a realizar los ejercicios, como así también para la sociedad – afirma Javier.
- Y adquirir también experiencia “en el aire” – cierra Luciano.

Si el proyecto “Radio UBA” logra llevarse a cabo, y la carrera de Ciencias de la Comunicación sigue encargada de la gestión y administración del mismo, esta búsqueda de experiencia que ansía Luciano Beltrán, como así también varios alumnos de esa carrera, no será totalmente satisfecha, ya que como afirma el director electo de la misma, el Licenciado Guillermo Mastrini, que asumirá el próximo año: “No creo que sea un lugar (Radio UBA) que lo debamos destinar para las prácticas de los alumnos, aunque quizás se puedan realizar algunas en la radio, pero no en la programación directamente, en el sentido de que no es un proyecto para insertar al aire trabajos prácticos, porque eso atentaría contra toda la estructura de la programación”.
La dulce espera de “Radio UBA” quizás llegue a su fin, ya que por primera vez parecen estar llevándose a cabo los trámites legales necesarios para su realización. El COMFER, el rectorado y la carrera de comunicación, parecen no estar muy apurados para que se realice la primera emisión, pero aunque sea lejano, existe un horizonte.